viernes, 13 de junio de 2014

Capítulo 43


Hola, hola!!!! ¿Qué tal? ¿Cómo va su día? Ojalá que todo bien, listas para disfrutar del finde y, a la que le gusta el fútbol, viviendo el mundial ajajajaja Gracias por sus comentarios! Un beso y hasta mañana!!!!! 

Twitter: @Caparatodos
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Luego se había ido a la cama y había estado mirando al techo incapaz de dormirse, hasta que al final se había dado por vencido y se había ido a la oficina, donde había pasado las siguientes dieciocho horas.

Capítulo 43:

Al día siguiente, cuando llegaron los de la mudanza, había supervisado que subieran con cuidado todo al camión y no se olvidaran de nada. Había pensado que cuando todo estuviera fuera de la casa, cuando hubiera desaparecido el constante recordatorio de lo que había perdido, podría relajarse, que ya no sentiría esa opresión en el pecho.

Le había preguntado a los tipos de la mudanza cuánto tardarían en llegarle a Lali las cosas, qué precauciones tomaban para asegurarse de que todo llegara en buen estado, y cuando se había dado cuenta  de  que  no  se  quedaría  tranquilo  por  más  que  intentara  comprobar cada detalle, había decidido tomar un vuelo y encontrarse con ellos en Mendoza. Solo para ver que todas las cajas llegaban sanas y salvas al departamento de Lali. No lo movía ninguna motivación.

Sí, no iba a negar que había estado fantaseando con volver a tenerla debajo de él, gimiendo su nombre. ¿Pero tenía alguna intención de hacer realidad esas fantasías? No, por supuesto que no.

O al menos así de claro lo había tenido hasta que la pegó a su cuepo para que dejara pasar a los hombres de la mudanza y ella había girado la cabeza para mirarlo a los ojos y pedirle que la soltara.
Esos ojos tan seductores, tan...

Bueno, aun así no iba a hacer nada. De hecho, la ira en esos mismos ojos le decía a las claras que ella no quería nada con él.

Estaba esa otra emoción, muy distinta, entremezclada con la ira, y tampoco podía negar que lo halagaba  saber  que  se  había  enamorado  de  él,  pero  no  quería  una  relación  con  esa  clase  de responsabilidad. Quería que Lali lo deseara, pero no que lo necesitara. No quería que fuera tan vulnerable a él, que intentara dejarlo una y otra vez como le había pasado a su madre con su padre, y fracasar cada vez. No, se había asegurado de que estaba bien, y regresaría a Buenos Aires sin mirar atrás.

Cuando la última caja estuvo dentro del departamento, firmó los papeles de entrega a los tipos de la mudanza, les dio una propina y cerró la puerta.
El departamento de Lali le pareció más chico de lo que lo recordaba. Claro que en ese momento había cajas apiladas en cada habitación.

De repente se preguntó si extrañaría no ver más en su casa las cosas que había dentro de aquellas cajas. Lali estaba abriendo una caja de la que sacó una lámpara, y él se quedó mirándola pensativo mientras la colocaba en el lugar que antes había ocupado: una mesita pequeña junto a una mecedora.

Lali enchufó el cable y dio un paso atrás para mirar la lámpara con una expresión inescrutable en su rostro. Peter no habría sabido decir si se alegraba o no de volver a ver la lámpara en su sitio.

Se giró para mirarlo, y Peter sabía exactamente qué venía a continuación: iba a despedirse de él. No estaba preparado; por eso la cortó antes de que pudiera decir nada.

—¿Por  qué  habitación  quieres  empezar?  —le  preguntó  forzando  una  sonrisa  y  metiéndose  las manos en los bolsillos del pantalón para que no viera sus puños apretados.

—Peter, te agradezco que me hayas enviado mis cosas tan rápido, pero puedo encargarme del resto.

—Pero, ya que estoy aquí, déjame ayudar —respondió él—. Llamaré a mi secretaria para decirle que voy a estar fuera un día o dos y...

—¿Qué? —exclamó ella, mirándolo boquiabierta.

—Esta  noche  podemos  pedir  una  pizza,  abrir  una  botella  de  vino  y  ver  una  película  —le  dijo Peter. Sí, algo casual para no intimidarla, para que no se sintiera presionada.

—¿Una pizza? ¿Te has vuelto loco o es que estás siendo cruel a propósito? —le dijo ella furiosa.

—Solo intento ayudar. Quiero...

—¡No se trata de lo que tú quieres, Peter! ¿Cómo puede ser que no lo entiendas? ¡No quiero ser tu amiga!

De repente Peter ya no era dueño de sus actos. Se plantó justo delante de ella, la agarró por los brazos y le gritó también:
—¡Yo no quiero que seamos amigos!
Lali parpadeó, tan sorprendida por su reacción como él.

—¿Y qué es lo que quieres? —le preguntó en un tono bajo.
Pasaron  unos  segundos  antes  de  que  finalmente  Peter  soltara  el  aliento  que  había  estado conteniendo.

—Te quiero a mi lado. Quiero lo que se suponía que íbamos a tener. Quiero a mi esposa, a la compañera que encontré en Las Vegas. Quiero que reconozcas que puedo darte una vida mejor de la que tendrás sola.

—No funcionaría.

—¿Por qué no? —indagó él soltándola.

—Porque... —Lali arrojó las manos al aire con impotencia. En sus ojos había tanto dolor que Peter supo lo que iba a decirle a continuación antes de que lo dijera—. Porque te amo, Peter.

No era una sorpresa después de lo que le había dicho antes de irse, o al menos no debería haberlo sido. Lo había intuido por la mirada en sus ojos esa noche en que le había dicho que no usaran preservativo, en un millón de pequeñas cosas. Sin embargo, oír las palabras de sus labios... fue como si le hubieran pegado un puñetazo en el plexo solar, dejándolo sin aliento, completamente aturdido.

Lali fue hasta la puerta y la abrió. Luego, sin levantar la mirada del suelo, le pidió:
—Ándate, por favor.


Continuará…

12 comentarios:

  1. alguien que cachetee al flaco este por favor
    masssssssssss
    @x_ferreyra07

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  2. ay Lanzani RACCIONA!!!!!!!!!! por dios!!! no te vayas sin decir nada, cerra esa puerta partile la boca de un beso y decile que vos también la amas!!!
    Espero el proximo!!

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  3. Ay me encanta
    Que reaccioné peter pordios
    : D

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  4. Amiga pero que ganas me dan de darles unas caxhetadas a.los dos se aman y no lo quieren afrontar.
    Ruthy

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  5. Definitivamente sube otroooo :))

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  6. Nah! Este Peter es un idiota! Un par de zopapos y lo arreglo
    Lore

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  7. Me mata la confusión d Peter,sabe lo k quiere,pero es muy cobarde.

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  8. OMG que le dira ahhh ne muero de la intriga

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  9. No nos puedes dejar asi! Peter reaccionaa
    Mas nove

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