sábado, 7 de diciembre de 2013

Capítulo 72



Hola, hola!!!!! ¿Cómo están? Espero que todo bien!!!! Gracias, gracias por estar ahí :D Se les quiere! Disfruten el finde! Besos y nos leemos mañana!!!

Twitter: @Caparatodos
____________________________________________________

-Ten cuidado con tu encaprichamiento, Espósito, creo que tienes competencia en ese frente. Según los medios, el Terrorista de Twitter ha estado muy ocupado con una morocha explosiva.
Lali tuvo que hacer un verdadero esfuerzo para mantener la seriedad.

-Claro, yo también lo había oído.

Capítulo 72:

A partir de ese momento, su día –que había empezado con la maravillosa noticia sobre Twitter y Peter- fue de mal en peor. Acudió al tribunal para una moción de eliminación de pruebas, relacionada con un caso de fraude con tarjetas de crédito, de cuyo resultado se sentía considerablemente segura. Aunque el Servicio Secreto se había encargado de casi toda la investigación, el registro inicial del domicilio del demandado había sido llevado a cabo por dos agentes de la policía de Buenos Aires, que habían atendido un aviso sobre un posible caso de violencia doméstica, realizado por parte de la esposa del demandado. Tras la llegada de la policía –y, por supuesto, con el consentimiento de la esposa- se había efectuado un registro y localizado en el armario del dormitorio más de mil tarjetas de crédito emitidas a diferentes nombres.
O, al menos, eso era lo que Lali había creído.

Una vez en el estrado, los policías se habían derrumbado por completo y habían admitido que “ups” tal vez, la mujer había anulado “técnicamente” su consentimiento, al verlos entrar en el dormitorio, pero habían proseguido con el registro, de todas maneras, ya que se encontraban en la casa.

Y así, Lali se había visto obligada a permanecer en la mesa de la acusación sin poder hacer nada por evitar que su caso saltara por los aires, mientras el juez, como es lógico, accedía a la petición de la parte demandada de suprimir como pruebas, todas y cada una de las mil tarjetas incautadas en la casa.
¡Un desastre!

Después de eso, se había pasado el resto del día escuchando las alteradas protestas de los dos agentes del Servicio Secreto que habían relevado a la policía de Buenos Aires en la investigación y tratando de descubrir si quedaba alguna prueba que le permitiera salvar de alguna forma el caso, solo para terminar sintiendo el comienzo de una espantosa migraña. Cuando se fue de su oficina, alrededor de las seis y media, la cabeza parecía estar a punto de explotarle, tenía náuseas, y hasta la suave luz del atardecer, que la recibió al salir, le resultó dolorosamente molesta.

Al llegar a casa, se puso inmediatamente unos pantalones de buzo y un polo, apagó todas las luces, se tomó un par de analgésicos, y se recostó en el sofá, rezando por quedarse dormida.

Una hora después, la despertó el sonido del teléfono. Se incorporó y gimió instantáneamente, sintiéndose como si alguien acabara de usar un taladro directamente contra su frente. Extendió la mano hacia la mesita de café, agarró su celular, y vio que era Peter quien la llamaba.

-Pero si es el hombre del momento –respondió, tratando de sonar animada, antes de volver a recostarse en el sillón cubriéndose los ojos con la mano-. ¡Ay, Dios! Si que eso dolió –lloriqueó.

-¿El qué dolió? –preguntó Peter, en tono preocupado.

-Los clavos con los que el hombre invisible me está perforando la cabeza.

-Eso suena terrible. Tal vez deberías sacar tu pistola invisible y matar a ese hijo de...
Lali soltó una carcajada y después volvió a gemir.

-No me hagas reír, duele demasiado. Estoy con migraña –le explicó.

-Sí. Ya imaginaba algo así. Voy camino de LightBox para encontrarme con Nacho. Vamos a tomar unas copas para celebrar mi contrato con Twitter. ¿Quieres que te lleve algo?
Aggg.

-Qué lindo. Gracias, pero estoy bien. Simplemente he tenido un día de mierda en el trabajo. Diviértete con Nacho, te lo mereces. La idea de Twitter ha sido una genialidad.

-Vuelves a estar impresionada –dijo él, sonando sumamente satisfecho-. Ya van tres veces que me pones el ego por las nubes, abogada.

-Imagínate que contesto a eso algo realmente ocurrente e impertinente –respondió Lali-. Ahora mismo, me duele demasiado como para pensar. Estoy oficialmente fuera de combate.


Treinta minutos después sonó el timbre de la puerta.
Al abrir y encontrarse con Peter, Lali le hizo automáticamente una seña.

-Chau, ándate. Deberías estar celebrándolo.
Ignorándola, él se abrió paso hasta el interior.

-Nacho puede esperar unos minutos. Va a estar toda la noche en el bar. No es que haya ido especialmente a encontrarse conmigo –cerró la puerta y la observó-. Así que, estás fuera de combate, ¿ah? No pensé que eso fuera posible.

-Bueno, eso es porque tú… -Lali se esforzó por encontrar una réplica semi decente en la nebulosa palpitante que era su cerebro… pero fue totalmente en vano. Exhausta, se apoyó contra el respaldo del sillón-. No se me ocurre nada. Adelante, puedes atacar sin miedo, estoy completamente indefensa.
Con una sonrisa curvando las comisuras de sus labios, Peter le tendió un vaso de café.

-Tómatelo. Mi mamá solía tomarlo para combatir las migrañas. Recuerdo oírla decir algo sobre que la cafeína ayuda.

-Gracias, eres el mejor –repuso Lali, aceptando el envase encantada. Ella también había tenido suerte en otras ocasiones con la cafeína pero esta vez no había logrado encontrar la energía suficiente como para parar en alguna cafetería de camino a casa.

-Muy cierto –Peter la cogió de la mano y la guió hasta el sillón-. Ahora, siéntate y tómatelo mientras yo pongo a trabajar mi magia –tomó asiento detrás de ella y empezó a masajearle el cuello-. ¿Quieres hablarme sobre tu día en el trabajo? –preguntó con suavidad mientras sus increíbles dedos iban deshaciendo los nudos que tenía en los hombros y en el cuello.

-El juez ha concedido una moción de eliminación de la que dependía uno de mis casos –Lali tomó otro sorbo de café-. Cuéntame lo que ha pasado con Twitter. No logro imaginarme sus caras al verte aparecer por allí.

Tal vez fue la cafeína, o el masaje, o sencillamente la sedante voz de Peter mientras le contaba la historia pero, poco a poco, Lali comenzó a sentirse un poco mejor. Seguía teniendo la migraña pero ahora parecía que el hombre invisible se estuviese limitando a golpearle la cabeza con algún objeto romo, en lugar de con uno afilado.
Una vez que se tomó la mitad del café, Peter cambió de postura en el sillón, reclinándose con las piernas extendidas.

-Acuéstate. Pon la cabeza sobre mi regazo –hizo un gesto negativo al verla arquear una ceja-. No seas malpensada, abogada. Esto no tiene segundas intenciones.
Lali depositó dejó su taza sobre la mesita mientras él agarraba uno de los cojines y se lo colocaba sobre las piernas. Iba a echarse de lado, cuando Peter la detuvo.

-No, boca arriba.
Se giró, se acurrucó cómodamente entre sus piernas, y apoyó la parte posterior de la cabeza sobre el cojín.

-Cierra los ojos –le susurró Peter.
Lali obedeció y, de inmediato, sintió sus dedos deslizársele con suavidad sobre la frente. Cuando él empezó a masajearle las doloridas sienes, sintió que el cuerpo se le derretía hasta formar un charco, y terminó gimiendo en voz alta.

-Oh, Dios… sí –suspiró-. No pares, por favor. Nunca.

-Puedo seguir toda la noche, nena –dijo él riéndose en voz baja-. Ya te lo dije, te tengo. Deja que yo me encargue de todo.

Continuará…

14 comentarios:

  1. Alguna duda q lali encontró al mejor,???se saco la grande! Lindo,sexy y bueno q mas ???
    Me re encanto el cap!!!!!!!!!!

    ResponderEliminar
  2. Esos momentos de intimidad son mas intimos aun que cuando hacen el amor... son momentos de una pareja hermosa como la que hacen =)

    espero mas noveee TQ amiiigaaa

    ResponderEliminar
  3. Me encanta!!Es divino preocupando por ella! Más!

    ResponderEliminar
  4. jajajajajaja ya parecen una pareja feliz y todo estos dos! ya se preguntan que tal el día el trabajo... son una pareja sin título todavía jaja maasss!!

    ResponderEliminar
  5. Jajaja hasta le hace masajes!!! Yo? me casaría eh! jajaja
    Quiero más!
    Lore

    ResponderEliminar
  6. Yo quiero que Peter me haga masajes! jajajaa

    ResponderEliminar
  7. yo quiero un Peter que me haga masajes!!! me encanto el capítulo!!! son muy lindos juntos estos dos!!!
    espero el proximo y buen finde para vos también!!

    ResponderEliminar
  8. Se jodio nacho, porque hoy peter amanece al lado de su amada cuidandola, yo tambien tengo migraña y necesito un masaje de esos, necesito un peter a mi lado yaaaaa!!
    @isakrn22

    ResponderEliminar
  9. yo tambien quiero un masajista como peter
    besos

    ResponderEliminar
  10. K cómoda se siente La abogada.

    ResponderEliminar
  11. Jajaja..yo tmb queria uno de esos mansajes..#VidaCruel jaja..son lo maas de lo maaas juntooos..
    @pl_mialma

    ResponderEliminar
  12. hjatlfdshjfhadjkldsjcxlszxax diooos me volví a enamorar de peter *-*
    precioso preciso mas! Me encanta.
    Atte. Sor

    ResponderEliminar