domingo, 1 de diciembre de 2013

Capítulo 66


Buenas!!!! ¿Qué tal estuvo su domingo? ¿Todo bien por sus lares? Espero así haya y siga siendo!!!! Un beso grande y denle la bienvenida a diciembre con una sonrisa enorme que en menos de 30 días se nos fue el año y si el día no les fue tan bien PONGANLE ONDA que después de lo malo o fastidioso viene la mejor parte... además, tienen varios días para disfrutar y así terminar el año de la mejor manera ;)!!! Hasta mañana y buena semana para todas!!!! 

Twitter: @Caparatodos
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-Acabo de encontrarme con Franco Morelli, cubierto de capuchino. ¿Es posible que haya dicho algo sobre un primer encuentro? No tengo la menor idea de a qué se refería –se detuvo junto a ella, frente a la puerta de la cafetería-. ¿Qué me perdí?
Lali sonrió. Pobre Pablo. Había estado tan cerca…
Quizás la próxima vez.

Capítulo 66:

Con el fin de entretener a los clientes, Lanzani Network Consulting LLC –o sea, Peter- había comprado un palco en el Club Alumni. Incluía cuatro asientos, con excelente panorama a tan solo veintiocho filas de la cancha, servicio de bar dentro del palco, y una mesa reservada en el exclusivo restaurante del club.

Por desgracia, como Lanzani Network Consulting LLC todavía no tenía ningún cliente, el palco no había estado muy animado últimamente. Así que, Eugenia había, básicamente, decretado que Nicolás y él organizaran una noche de chicos para “crear vínculos”.

Peter le había ofrecido dos de los asientos a Nicolás y le había dicho que no dudara en traer a algún amigo. Y, por su parte, le había pedido a Nacho que los acompañara –cuantos más fueran, mejor sería.
Aunque, tal vez, aquel no siempre fuera el pensamiento más acertado.

Peter miró con desconfianza a los dos policías –sí, ahora eran dos; al parecer, se multiplicaban como los gremlins al mojarse- cuando abrieron la cortina de separación al palco.

-Qué bueno –le dijo a Nicolás-. Trajiste al hombre que casi me despellejó el tobillo al ponerme el dispositivo para monitorearme.
Nicolás se giró hacia el tipo alto, de cabello y ojos claros que se encontraba junto a él.

-Lo había olvidado por completo.
El otro agente –el Agente Nicolás Vázquez, si la memoria no le fallaba- pareció tan sorprendido como Peter.

-Solo me dijiste que tenías una entrada de sobra –le dijo a Nicolás Riera-. No comentaste nada sobre quién más iba a acompañarnos.
Nicolás miró alternativamente al otro Nicolás y a Peter.

-Esto es un poco incómodo.
Una mesera entró en el palco, al ver llegar a los hombres.

-¿Puedo traerles algo para tomar?
Cuatro manos se levantaron simultáneamente.

-Una cerveza.
Una vez que se marchó la mesera, los dos agentes se instalaron en sus asientos, directamente detrás de Peter y Nacho.

-En mi defensa –le explicó Nicolás a Peter-, diré que estabas intentando coquetear con mi novia en ese momento. Y que me llamaste Lobezno.

Peter sonrió para sí mismo al recordar esa parte de la historia. La noche que había sido liberado de la cárcel, Emilia Attias, la fiscal, junto con Nicolás Vázquez, se había reunido con él para explicarle que iba a poder cumplir el resto de su condena bajo arresto domiciliario –como parte de un acuerdo al que Eugenia había llegado con la policía y la fiscalía, aunque Peter lo ignoraba en aquel momento–. Puesto que la fiscal había sido la primera mujer, aparte de Eugenia, que Peter veía en cuatro meses, y que no se había dado cuenta de que ella y Nicolás estaban juntos, puede que le hubiera hecho un par de comentarios inofensivos, en un ligero tono de coqueteo.

-¿Existe la posibilidad de que te olvides de eso? –sugirió Nicolás, mirando alternativamente a Nico Vázquez y a Peter.
Con un encogimiento de hombros, Nicolás miró a Peter.

-No es que tenga muchas opciones –hizo un gesto, señalando a Nicolás-. Aquí Riera acaba de ser ascendido a Agente Especial al mando. No quiero arriesgarme a que me envíe como mula de carga al otro lado del país, para encargarme de un caso de dos años de duración, porque fastidié las cosas con su futuro cuñado.
Peter le lanzó una horrorizada mirada a Nicolás.

-¿Cuñado?
Nacho le palmeó el hombro desde el asiento de al lado.

-¿Ves? Y tú estabas preocupado porque no iban a tener nada sobre lo que hablar.


Por suerte, la necesidad de mantener una conversación desapareció en cuanto el partido comenzó. Como parte de la promesa que le había hecho a Eugenia de “esforzarse”, Peter había escogido expresamente un partido entre Alumni y Newman, ya que Nicolás era de la Provincia de Buenos Aires y, por lo visto, un gran seguidor.
Y eso bastó para cambiar las cosas. La rivalidad deportiva predominó sobre su antigua enemistad como ex-convicto y agente, y no tardó en fluir una ligera charla.

Al fin y al cabo, eran hombres –raro era el tema que no podía ser dejado de lado, al menos temporalmente, dentro de los límites del deporte.
Sin embargo, poco antes del final de la segunda parte, se encontraron con el primer contratiempo técnico.

-¿Cómo van las cosas con Lali últimamente? –preguntó Nacho en tono casual.
Peter se quedó paralizado, con la cerveza a medio camino de la boca.
Acababa de cargarla.

Había estado fuera de la ciudad desde el miércoles y no había tenido tiempo de poner a Nacho al día sobre la clandestina de su relación con Acusatrix Espósito. Ni se había imaginado que Nicolás iba a llevar al partido al novio de su jefa.

Aún así, algo tenía que hacer para arreglarlo. Le había prometido a Lali que mantendría su relac… –eh, su fogosa aventura sin ataduras- en secreto, y tenía la intención de cumplir esa promesa. Porque si ella pensaba que su jefa sospechaba algo, pondría fin, sin duda alguna, a todo futuro posible encuentro.
Y Peter no estaba preparado aún para dejar a Lali.
Así que, se recostó en la silla, adoptando un aire indiferente.

-Por desgracia, no van. Me metió cualquier escusa esa noche en LightBox, alegando que no le gusta mezclar el trabajo con el placer.
Nacho frunció el ceño, comprensiblemente confundido, ya que Peter le había dicho que iba a ir a casa de Lali esa noche, y abrió la boca para decir algo.
Peter sacudió disimuladamente la cabeza.

Nacho permaneció inmóvil por un instante, y luego su mirada se desplazó hacia ambos agentes y pareció entender lo que sucedía. Así que, adoptó él también un aire indiferente.

-¡Qué cagada!. Pensaba que lo lograrías.

-No eres el único –dijo Peter con una sonrisa-. Supongo que no tenía que ser.

-¿Están hablando de Mariana Espósito

Continuará…

12 comentarios:

  1. Ay Nachin q metida de pata!!!!!!!!!!!!!!!!BUENISIMO!!!!!!!!!

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  2. Más me encanta!! Nacho los hundió peor que el titanic!!

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  3. Jaja ese nacho y su metida de pata jaja
    Amiga que tengas una linda semana yo espero que la mia sea mucho mejor aunque sinceramente el mes de diciembre me pone sensible extraño mucho a los que no están a mi lado :( pero bueno a seguir adelante así es la vida.
    Rita aparece :)
    @Masi_ruth

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  4. nacho por poco y la embarras
    gracias por avisar

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  5. Peter no se olvida acusatrix esposito.
    Ya nacho metio b la pata hasta el fondo, pero np creo que riera diga algo, del que no me fio es del otro nicolas..
    @isakrn22

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  6. Pilladon jajajajaja ya quiero leer el deo genia!! Ojala tengas una linda semana;))

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  7. Nacho metio la para hasta donde te digo yo.... jajaja igual Peter capeo la situación y parece que salio airoso de la situacion. ESPERO que consiga, porque como sospeche algo Lali lo mata jajaja

    espero el siguiente TQ!!!!

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  8. Ojala desvíen la conversación sino Lali le dice adios a Peter!!
    Sorry por no estar firmando pero me atrase :(, pero ya me puse al día!! =D
    jajjaaj Nacho igual ya metiste la pata!!
    MÁSSS!!

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  9. Jajajaja,esa relación va a ser un secreto a voces.

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