Hola, hola!!! ¿Cómo les va? Espero que todo bien hoy o
al menos buscando la forma de que así sea! Gracias por sus comentarios ;)
Capítulo para Giu!!!!!! FELICES 18 :D Besos y mañana nos leemos!!!
P.D.: Tengo una pregunta/duda: Alguna ha leído una nove (no
Laliter, libro) donde él vuelve después de unos años a vengarse y es amigo de
ella… creo que los dos son policías y se infiltran y ella tiene un padrastro y
al final resulta que está involucrado con la misión??? Si alguien la leyó me
hace acordar el nombre??? jajaaj me entró la duda en la mañana y no me acuerdo
ni como se llama la nove ni los personajes :S GRACIAS!!!!
Twitter:
@Caparatodos
____________________________________________________
Gracias a Dios que los seis años que llevaba asistiendo a
los juzgados le habían permitido perfeccionar su cara de póquer; de lo
contrario, su mandíbula habría golpeado el piso en ese instante.
¿Es broma?
Capítulo 18:
El simple hecho de ver su nombre bastó para que la
inundara una repentina oleada de recuerdos. Esos asombrosos ojos verdes y su
sonrisa sexy. El delgado y musculoso cuerpo. Su boca cubriendo la de ella,
mientras Lali lo abrazaba a la luz de la luna.
Probablemente no fuera buena idea comentarle a su jefa
que había besado al acusado de su primer caso.
-El caso del terrorista de Twitter –dijo Lali en tono
casual. Ok, tal vez la hubiese sorprendido aquel inesperado giro de los
acontecimientos, pero nadie más tenía por qué saberlo. Puede que, una vez, Juan
Pedro Lanzani lograra que su corazón dejara de latir con un simple beso, pero
desde ese entonces habían pasado años. Ahora, ella era Lali, Labogada, y no dejaría que nadie la
viera nerviosa en el trabajo.
-Me pareció un caso interesante para que empezaras –Emilia
se detuvo de camino hacia la puerta-. Siéntete libre de pasarte por mi oficina
cuando quieras. Mi puerta está siempre abierta.
Cuando se fue, Lali miró la fotografía de Peter que se
encontraba sujeta con un clip a la parte superior del expediente. Como era de
esperar, tenía una expresión seria y disgustada, muy distinta a la del
encantador chico, que la había acompañado a casa aquella cálida noche en
Mendoza.
Se preguntó si él la recordaría.
No es que le importara, obviamente.
No le cabía la menor duda de que Juan Pedro Lanzani debía
haber besado a muchas mujeres durante los últimos diez años –ni de que había
hecho con ellas un montón de cosas más, aparte de eso- así que parecía poco
probable que experimentara reacción alguna cuando la viera entrar a la sala el
día siguiente. Lo que le parecía estupendo. Al fin y al cabo, recordaba que su
primera impresión sobre él aquella noche no había sido del todo favorable.
Y aunque la segunda impresión y la tercera habían
resultado ser muy diferentes… Bueno, siempre podía ampararse en la ley. Porque
una demandante seria como ella no permitía que la alteraran los acusados a los
que se enfrentaba en el tribunal. Ni siquiera los que le habían dicho que estarían
dispuestos a manejar durante horas para llevarla a comer alitas de pollo.
Por suerte, se trataba de una vieja historia. Sí, las
circunstancias de su “reencuentro” resultaban irónicas, puede que hasta
ridículas. Pero, en definitiva, no trataría a Juan Pedro Lanzani de manera
distinta a como había tratado al resto de criminales con los que se había
encontrado durante su carrera como ayudante del Fiscal. Al fin y al cabo, era
una profesional.
Y, al día siguiente, iba a demostrar exactamente eso.
-¡Peter, Peter! ¿Qué planes tienes para el futuro ahora
que eres un hacker convicto?
-¿Has hablado con Daniela después del arresto?
Sentado a la mesa de la defensa, en la parte delantera de
la sala, Peter ignoró las preguntas y los flashes que se disparaban detrás de
él.
Antes o después tendrían que aburrirse, pensó. En menos
de una hora, recuperaría su libertad y, entonces, todo habría terminado.
-¿Piensas hacer de Facebook tu próximo objetivo? –gritó
otro reportero.
-¿Te gustaría hacer alguna declaración antes de que
llegue el juez? –inquirió otra voz.
-Claro, aquí tienes una –dijo Peter entre dientes-. Estoy
deseando dejar todo este espectáculo atrás para no tener que escuchar más
preguntas idiotas.
A su lado, uno de sus abogados –inexplicablemente tenía
cinco- se inclinó hacia él para susurrarle.
-Tal vez deberíamos responder a las preguntas de la
prensa.
Las puertas de la sala se abrieron y los flashes se
dispararon enloquecidos. Un murmullo se extendió entre la multitud y Peter supo
que solo podía significar una cosa: o su padre o su hermana acababan de entrar
en la sala.
Miró por encima del hombro y vio a Eugenia avanzando por
el pasillo, con sus enormes lentes de sol y su abrigo. Tenía el pelo rubio, varios
tonos más claro que el suyo, recogido en una especie de moño, e ignoró
fríamente a los periodistas mientras tomaba asiento en la primera fila de la
tribuna, justo detrás de Peter.
Se volteó para mirarla y tuvo que parpadear ante la
multitud de flashes que instantáneamente lo cegaron.
-Te dije que no vinieras –gruñó.
-¿Y perderme el gran final? Ni loca –Eugenia sonrió-. El
nerviosismo por saber cómo termina todo ha sido más grande que yo.
Ja, ja. Peter abrió la boca para responderle –cinco meses
atrás, le había dado permiso a su hermana para burlarse y desde entonces no
dejaba pasar una. Cuando ella se quitó los lentes, revelando un enorme y feo
hematoma amarillento en la mejilla.
Aggg… ¡Demonios!.
Imposible decir ya nada sarcástico. Dudaba que alguna vez
fuera a dejar de sentirse culpable por el hecho de que su hermana hubiese terminado
con ese hematoma y con una muñeca rota –y de que hubiese estado a punto de ser
asesinada- mientras trabajaba con la policía, como parte del trato que había
hecho para sacarlo de la cárcel.
Apretando instintivamente los puños, se dijo que era una
suerte que el tipo que le había causado las lesiones estuviese entre rejas.
Porque un moretón en la mejilla y una muñeca rota serían el menor de los
problemas de Mauricio Dente, si Peter podía permitirse alguna vez pasar cinco
minutos a solas con el tipo. Sí, puede que Eugenia fuese medio pesada, pero aún
así. Peter había establecido claramente las reglas en el colegio, poniéndole un
ojo morado a un chico por haber insultado a Eugenia en el recreo, delante de
todo el colegio.
Nadie se metía con su hermana.
Así que tomó la broma de Eugenia con una sonrisa.
-Muy graciosa, Euge –luego, frunció el ceño cuando un
hombre, vestido con terno, entró a la sala-. ¿Invitaste a sexy, rubio y seductor?
–le preguntó a Eugenia mientras el agente Nicolás Riera se acercaba a ellos.
Pese al hecho de que su hermana estaba viviendo
prácticamente con aquel tipo, Nicolás y él seguían estudiándose el uno al otro
con cierto recelo. Al estar en la cárcel durante todo el tiempo que Eugenia y
el agente habían estado saliendo, no había tenido oportunidad de observar el desarrollo
de su relación. Lo único que sabía era que, de repente, Nicolás Riera había
irrumpido en sus vidas. Y Peter se estaba mostrando un tanto… cauteloso antes
de darle la bienvenida a la familia.
-Trátalo bien, Peter –le advirtió Eugenia.
-¿Qué? –preguntó con aire inocente-. ¿Cuándo no he sido
yo amable con sexy, rubio y debes estar bromeando con ese tipo?
-Me gusta. Anda acostumbrándote.
-Es un policía. Los tipos que me arrestaron, ¿te acuerdas?
¿Dónde está tu sentido de la lealtad?
Ella fingió considerarlo.
-Refréscame la memoria… ¿Por qué te arrestaron
exactamente? Ah, sí. Porque violaste unas dieciocho leyes internacionales.
-Seis leyes. ¡Y era Twitter!
Continuará…
Se hace desear pero va a llegar!! Me encanta!!! Más!!
ResponderEliminarNecesito otro cap!!! Quiero reencuentro laliter :(
ResponderEliminar@ROCHI16TA
NECESITO , seriamente ese capitulo...
ResponderEliminarK bien se llevan los hermanos.Maaaaaaas.
ResponderEliminarjajajajaja lo q me rio con estas conversaciones de hermanos
ResponderEliminarla verdad de la novela que hablas tengo un vago recuerdo, pero era adaptada a laliter,
si me llego acordar bien te aviso
besos
Ajhhhsdhsg ya quiero LALITERRR
ResponderEliminarLo q va a ser ee reencuentro!!!!!!!!Fuego y hielo!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
ResponderEliminarmassss . :*
ResponderEliminares que no es pa tanto!!! jajaja apobre mio, yo lo entiendo... el problema no ess que haya hackeado twitter, porque si solo hubiera sido eso, estoy segura que como mucho hubiera sido un juicio de faltas. El problema es que fastidio a mucha gente y la gente sin internet MUERDE jajajajaja (es una muestra mas de que estamos demasiado apegados a las redes sociales e internet en general)
ResponderEliminarayyy muero por que se encuentren en el juicio... como lali va a poder juzgarlo?? ayy miedito me dan estos dos jajaja
espero mas noveeee eTQ!!! y Giu, una vez mas FELICES 18 tq
Ayyyy ya quiero que vea a lali :3
ResponderEliminarQuiero masssss
Reencuentro reencuentro reencuentro :DD
ResponderEliminarArii
hola (caparatodos) todavia no se tu nombre (? me pase por aca para avisarte que no podre comentar muy seguido en estas semanas, el perdido algo muy importante en mi vida, y realmente me siento mal... mi abuelo del alma murio y yo no puedo hacer mas que recordar los momentos felies que pasamos juntos... bueno solo eso... pero no te preoupes que seguire leyendo, no dudes en avisarme ;) un beso...
ResponderEliminar@AnglesCasi - abetterworldlaliter.blogspot.com.
PD: yo tambien quiero reencuentro LALITER ;)
Me encanto el capítulo! Pobrecito el no hizo nada grabe solo violo algunas leyes y dejo sin twitter a todo el mundo nada más!! jajajajaj
ResponderEliminarEspero el proximo capítulo!!!!!!
Me muero por ver sus reacciones
ResponderEliminarmas nove
ResponderEliminaren el próximo cap el rencuentro ????''
ResponderEliminarMe encanta!!!!! Subi maaas...
ResponderEliminarTengo una pregunta, la novela anterior en la que estaba valentina la hijita de Lali.. Es adaptada? Y en el caso que sea, como se llama la novela original?
ResponderEliminarCamiiiiiiiii! Antes que nada muchas GRACIAAAAAS!! Que regalo mas hermoso a pesar de la distancia jajaj!muchas gracias de verdad!! Me encanta el capitulo y..poco a poco ehm!Espero mas nove, beso!
ResponderEliminar'Sexy y rubio'? ajajajaja me encantan estos mellizos!
ResponderEliminarQuiero más!
Lore