Epílogo

Hola, chicuelas!!!! ¿Qué tal? Arrancando el finde con tutti me imagino!!!! Gracias por ser TAN lindas, tan incondicionales y unas lectoras TAN geniales!!!!! En serio les agradezco por estar ahí día a día y por darse el tiempo que se dan en leer y comentar ya sea por acá o tw! Sepan que me encanta leerlas aunque no les comente o responda! Gracias por estar ahí una nove más y gracias por animarse a leer!!!!!!! Besos y ahora sí, esto fue todo de “Para toda la vida” ojalá les haya gustado ;) Mañana nos leemos o quien sabe y por ahí es más tarde!

Les dejo el link de descarga: https://www.dropbox.com/s/1gnv0qv1nja51da/Para%20toda%20la%20vida.doc y, si no, ya saben que lo pueden encontrar en la columna de la izquierda ;)

Twitter: @Caparatodos

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—Acepto la apuesta —dijo y lo besó para sellar esa apuesta que los uniría toda la vida.

Epílogo:

Guiada por el tenue resplandor de la luz de la luna, Lali volvió a la cama en la madrugada. Dejó caer su bata en el suelo y se metió entre las sábanas. Peter la estrechó entre sus brazos inmediatamente.

—¿Está bien? —le preguntó él en un susurro.

—Sí. Ha vuelto a balbucear dormida, supongo.

—Hace unos ruiditos muy graciosos —dijo él, riéndose—. Anoche me sorprendió un par de veces mientras dormía en la mecedora.

—Me preocupa un poco que solo hayas visto lo mejor de ella —dijo Lali, apoyando la cabeza en el pecho de él—. Quiero decir que es una niña muy buena, pero a veces es bastante traviesa.

—¿Lo mejor de ella? ¿Te conté sobre esos dos pañales tóxicos que tuve que cambiar anoche?

—No… no me dijiste nada —dijo Lali, sonriendo.

—Pero esta mañana cuando se despertó y me regaló una de esas sonrisas con dos dientecitos… Bueno, se me derritió el corazón.

—Yo reacciono igual ante esa sonrisa cada mañana —admitió Lali.

Peter se puso de lado y se inclinó sobre ella. Le apartó el pelo de la cara.

—Sé que vas a tardar un tiempo para creer que voy en serio con esto, pero creo que deberías ver las señales. He sobrevivido a un fin de semana con tu mamá y su hermana. He sobrevivido al interrogatorio de tu abuela, al examen sobre autos clásicos de tu hermano, a una noche con una bebé enferma y enojada y con su mamá cascarrabias… Y sigo aquí. Y todavía estoy ansioso por ver qué pasará después.

Lali sacudió la cabeza.

—A lo mejor es que no entiendo por qué estás empeñado en ser parte de mi loca vida.

—Porque te amo —dijo él sin dudar—. Y adoro a Valentina. Me gusta la idea de que seamos una familia. Y a lo mejor un día llegamos a ser una familia aún más grande.

Lali tragó con dificultad. La idea de tener un hijo con Peter era algo en lo que no había pensado hasta ese momento. Se había convencido de que no volvería a tener otro hijo, pero de repente las cosas ya no estaban tan claras.

—¿Muy rápido?

—A lo mejor un poquito —dijo ella, riéndose.

Peter le rozó los labios con los suyos.

—Tenemos mucho tiempo para hablar de eso. Creo que primero deberíamos casarnos, para que tu mamá esté contenta, claro.

—Casarnos…

—Casarnos —dijo Peter, riéndose a carcajadas—. No quiero ser un marido de fin de semana. Quiero ser un marido para toda la vida. ¿Qué te parece la idea?

—Creo que después de todo, la abuela le dio el anillo a la nieta indicada.

—¿Eso es un «sí»?

—Es un «sí». Nos tomaremos nuestro tiempo, haremos las cosas bien, estaremos seguros de las decisiones que tomemos, pero…

—Estaba pensando en que podíamos casarnos pronto. El lunes estaría bien, pero si tú necesitas algo más de tiempo, no hay problema. Sé que ahora no puedes salir de vacaciones, pero podemos planear el viaje en unos meses.

—Eh… ¿El lunes?

—Acá no hay que esperar tanto para conseguir un permiso, así que eso no es problema. No quieres un casamiento por todo lo alto, ¿no? La boda que le describiste a tu tía parecía perfecta. Nosotros, el juez de paz, Valentina y ya está.

—A mí también me pareció perfecta. Pero, ¿el lunes?

Peter soltó una carcajada.

—Está bien. Mejor el mes que viene. Cuando estés lista. Tómate tu tiempo —sus manos empezaron a moverse sobre el cuerpo de Lali.

—Lunes… —pensó ella, arqueando el cuerpo al sentir sus labios sobre los pechos.

—Pasado mañana…

Definitivamente tendría que pensar en esa propuesta, más tarde, mucho más tarde… Es más, estaba segura de que Peter encontraría la forma de convencerla.

¡FIN!