lunes, 28 de abril de 2014

Capítulo 86


Hola muchachas!!!!!!! ¿Cómo les va? Espero empiecen con todo la semana!!! :D Ahh... la intriga, que sería de las novelas en los blogs sin ellas, no?! Gracias por leer!!!! Besos y hasta mañana!

Twitter: @Caparatodos
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Era su problema; todo el mundo podría haber decidido salir de allí y que se ocupara ella sólita; Peter se habría quedado con ella, después de todo, era su chica. Y Santiago era la ley. Pero Leonardo, Gustavo, Pablo, Salvador, Alonso, Beatriz, Euge, Nadia... no era su problema, sino el de ella.

Capítulo 86:

Las lágrimas se le agolparon en los ojos. La gente de Fiambalá estaba arriesgando su vida por ella, sin decir una palabra. Lali sintió que la tocaban y se volteó para encontrarse con el abrazo de Peter.

—Peter —susurró—. Ten cuidado.

—Sí. —Peter la separó un poco de su cuerpo para mirarla a los ojos—. Estaremos bien. ¿Y tú?
Lali hizo lo que pudo por sonreír para tranquilizarlo.

—Sí, estaré bien —dijo, antes de que se le quebrara la voz.

—Saca tu pistola.

—Ah. —Lali se había olvidado por completo de ella. Sacó la pistola, preguntándose si sería capaz de utilizarla.

—Recuerdas lo que te dije acerca del gatillo, ¿verdad?

—Sí, Peter. —Lali parpadeó para no llorar.

—Fija el blanco en un punto pequeño e inclina el cuerpo hacia delante. Empuja, no pegues un apretón. ¿Tienes munición de sobra?
Lali apretó el bolsillo y asintió.

Peter le dio un beso rápido y apasionado y, para cuando la primera lágrima rodó por su mejilla, ya estaba saliendo por la puerta con Santiago.

—¿Papá? —La voz de Stefano se quebró a mitad de palabra. Santiago se detuvo en la entrada y miró atrás.

—Dime, hijo.

—Yo también necesito un arma.
Lali vio las emociones que reflejaban el rostro de Santiago: sorpresa, miedo, orgullo.
Ganó el orgullo.

Santiago se acercó a la mesa auxiliar donde Pablo había atrincherado las armas y escogió un rifle. Lo agarró con fuerza y se lo entregó a su hijo.
Lali no pudo soportarlo. Una cosa era que Santiago, Peter y sus hombres la defendieran y otra muy distinta era que Stefano lo hiciera. No era más que un niño.

—No, Santiago —le rogó—. Es mi guerra, y no podría soportar que le dispararan a...
Santiago la calló con una mirada.

—Eres uno de los nuestros, Lali. Stefano aprendió a disparar a los seis años; yo mismo le enseñé. Supongo que hasta ahora no me había dado cuenta, pero ya no es un niño. —Con gesto solemne, Santiago le entregó el arma a Stefano quien lo agarró con la misma solemnidad—. Protege a las mujeres, hijo.

—Lo haré, papá.
Santiago asintió y siguió a Peter.
En cuanto salieron, una sonrisa apareció en la cara de Stefano.

—¡Dios! —gritó feliz, tomando posiciones junto a la ventana principal. Con una mano sostenía el arma junto a la oreja, como en la tele, mientras con la otra golpeaba el aire—. ¡Esto es increíble!


El agua caía con fuerza y se podían escuchar los relámpagos, escondiendo el sonido de las pisadas. La tormenta podía ser un enemigo, y Peter sabía que tenía que ponerla de su parte, y no en su contra. La temperatura había caído en picada.

Peter se agachó y fue pasando en silencio de puerta a puerta a lo largo de la avenida, seguido de cerca por Santiago. La mente de Peter iba a toda velocidad. El tiempo. El tiempo era crucial. Lavalle se había mostrado claramente culpable de que uno de sus hombres hubiera traicionado a Lali, y había trabajado duro para darle a Peter toda la información que pudiera.

J.I Ferrero había ido a ver a Fadul fuera del horario de visita, alegando una urgencia médica. A los prisioneros no se les permitía llamar hasta las siete de la mañana, cuando se grabó una conversación entre Fadul y uno de sus matones. Lavalle había chequeado todos los vuelos. Incluso asumiendo que hubieran tenido a un equipo de asalto listo para salir enseguida, los asesinos no podrían haber llegado antes de las dos de la tarde a San Fernando del Valle. Todos los vuelos que salían de Aeroparque se habían retrasado por la tormenta; además, había un trayecto de más de tres horas desde el aeropuerto a Fiambalá con buenas condiciones meteorológicas y teniendo en cuenta que se conociera el camino. Alguien que no conociera el lugar, y en medio de una tormenta, tardaría unas cuatro horas.

Peter revisó el reloj. Las cinco y media. Tenía una media hora para organizarlo todo. Peter maldijo en alto cuando sonó el teléfono. Antes de que sonara por segunda vez, ya había atendido.

—Peter —dijo en voz baja, sin dejar de inspeccionar su alrededor.

—Soy Lavalle. Tenemos noticias.
Peter cerró los ojos y rezó en silencio.

—Dime que la cacería ha finalizado y que los perros vuelven a estar encerrados.

—Lo siento, ya me gustaría. ¿Qué está sucediendo allí?

—Tengo a Lali a salvo en un lugar seguro, y el sheriff y yo nos dirigimos a su casa a organizar la bienvenida para los matones.

—Bueno, buena suerte entonces. Diles a los malos que, de todas formas, nunca habrían cobrado la recompensa.
Una camioneta giró despacio en la esquina y Peter se tensó hasta que la camioneta siguió de largo y reconoció a un hombre cuya propiedad lindaba con el suyo.

—¿Qué significa eso? —preguntó.

—Fadul está muerto.

—¿Qué? —Peter frunció el ceño. ¿Había escuchado bien? No podía darse el lujo de haber escuchado mal. No, ahora que la vida de Lali estaba en juego—. Repíteme eso.

—Fadul sufrió un ataque al corazón alrededor de las tres. —No pudo evitar ocultar su satisfacción—. Lo declararon muerto a las tres y cuarto de la tarde. Acabo de enterarme.

—¿Podría estar simulándolo?

—No, a no ser que haya llegado a un pacto especial con Dios. Los restos de Fadul están esparcidos sobre una mesa de autopsias ahora mismo. El patólogo dice que bebía demasiado y que tenía el hígado destrozado. Así que... si atrapas a esos tipos, todo habrá terminado.
Colgó y trató de olvidarse de lo que Lavalle acababa de contarle. Tenía que centrarse por completo en la misión que tenía entre manos.

—¿Quién era?

—Después te digo. —Peter señaló hacia la casa de Lali y giró la muñeca. «A la parte de atrás». Santiago asintió y se dirigieron en silencio hacia atrás. Peter entró con su llave. Se metieron en la casa y cerraron la puerta. Sacó una linterna del bolsillo y sacó una de las trampas del maletín. Sacó las toallas que había cogido de la cocina y le dio una a Santiago.

—No podemos dejar ninguna huella. —Santiago asintió y fue secando mientras Peter ponía las trampas. En cuarenta y cinco segundos, habían terminado. Peter gruñó de satisfacción y se dirigió de inmediato a la habitación.

Estaba metiendo la ropa de Lali debajo de la manta, para que pareciera que estaba durmiendo, por si acaso alguien miraba por la ventana, cuando Santiago le dio en el hombro. Peter asintió. Él también lo había oído. Un auto se aproximaba.

Peter miró por la ventana. El auto no tenía luces y se detuvo a unos cincuenta metros de allí. Descendieron dos tipos y cerraron las puertas con cuidado. Era imposible distinguir sus rostros, pero por la forma en que se movían, Peter supo que eran profesionales.

Inmediatamente empujó a Santiago en el armario y cerró la puerta. Eso debería protegerlos en caso de que sucediera lo peor y hubiera onda expansiva. Peter miró el reloj. Los tipos llegaban quince minutos antes de lo que habían estimado. Eran rápidos, y buenos.
Pero él era mejor.

Continuará…

20 comentarios:

  1. MIERDAAA

    maaaaaaaassssssssss

    @x_ferreyra07

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  2. Necesito otro capítulo!!!!!!!!!!
    Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhh

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  3. NOOOOOOO no puedes dejarlo asiiiiiii quiero mas!!!!

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  4. Como lloré con el trocito d Stefano.
    Peter les va a dar su merecido!!!!

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  5. Ai NOO! Otro mas te lo pedimos por lo q mas quieras no podes dejarnos asi Mala! Ame La frase #EranRapidosyBuenos. Pero el era mejor!. Que Suspenso :D

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  6. Ahhh La hora de la verdad!
    Quiero más!
    Lore

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  7. masssssssssss no nos puedes dejar asiiiiiiiiiiiii hasta mañanaaaaaaaaaaa. besos

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  8. No no no no!!!! Me encanta más! !

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  9. OH DIOS SANTO QUE PASO???, NO ME DEJES ASIII
    XFA SEGUILA MASSSSSSSSSSSSS
    BESOS

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  10. Dios!! no lo dejes asi!!1
    LA INTRIGA MATA!!
    Segui!! uno menos pero cuantos mas habran!!
    @gbv_17

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  11. Que no les pase nada por favorrr
    MAs novee

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  12. Me encanta!!! Ya estoy esperando el próximo!

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  13. Oooh no!!!!

    @laliteronfire

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  14. Otrooo ya ya ya!!! Peter no cuenta con el profesional que llego antes, que hará ese???

    Arii

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  15. Nooo me podesss dejar asiiiiiiiiiiiiii... que paso quiero saberrr...... ahhhhhhhhhhhhhh....

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  16. Pordios más jaja
    Me encanta
    Por fin lali si todo sale bien lali será libre

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